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lunes, 12 de marzo de 2012

Recomendaciones de Andrés: La otra tierra (Another Earth, USA, 2011)


Dirigida por Mike Cahill y protagonizada por William Mapother (John Burroughs) y Brit Marling (Rhoda Williams). Inicio señalando que Brit Marling hace una interpretación maravillosa (la sacó del estadio). En fin, se trata de una película que gira en torno al drama de una mujer con conciencia de culpa por haber matado en un accidente de tránsito a la familia de John Burroughs. No obstante, el trasfondo de la historia es la aparición de otro planeta tierra, un planeta reflejo. Esta sí que es una película con un director que puso su sello personal, y una banda sonora muy diferente a la tradicional, pues no se trata sólo de incluir música en las escenas, sino también ruidos, campanas, sonidos diferentes. La trama es algo inverosímil en ciertos momentos (pienso, por ejemplo, la forma en que Rhoda entró en la casa de John haciéndose pasar por empleada doméstica… eso no se la cree nadie). Pero en términos generales, logra muy bien expresar los sentimientos que abordan y destruyen la vida de los personajes. Muy recomendada.

Andrés Botero Bernal

Recomendaciones de Andrés: Mi otro yo (The Beaver, USA, 2011)



Dirigida por Jodie Foster. Se trata de un drama familiar donde el padre (Mel Gibson) cae en una profunda depresión y termina por ser adoptado por una marioneta que termina por controlar su vida. También actúa allí Jodie Foster (como la madre y abnegada esposa) y Anton Yelchin quien hace una excelente interpretación del hijo mayor. La película es muy regular, pues no es convincente la actuación de Gibson, dejándose perder una excelente oportunidad para retratar los traumas psiquiátricos que están de fondo en la película. Sinceramente, hay escenas que supuestamente son dramáticas que parecen sacadas de una comedia. El papel de Jodie Foster es, igualmente, poco convincente, aunque creo que logra una mejor presentación del drama que la que hizo Gibson. Quien sí la sacó del estadio fue Yelchin. ¡Qué buena interpretación! Lo que saco, como mensaje, es el valor de acompañar al otro. El acompañamiento es un valor cuando se ofrece a quien lo necesita. Igualmente, palpita en el fondo el gran dolor de la sociedad burguesa contemporánea: a soledad asociada a la depresión. No la recomiendo mucho.

Andrés Botero Bernal

Recomendaciones de Andrés: Moneyball (2011, USA)



Dirigida por Bennett Miller y protagonizada por Brad Pitt y Jonah Hill. Esta película está basada en una historia real del gerente general de los Atléticos de Oakland, equipo profesional de Beisbol, quien revolucionó el juego al incluir las estadísticas y las matemáticas en los procesos de contratación de jugadores. Se trata de un film sin mayor aporte artístico por parte del director pero con una buena trama ayudada por la interpretación brillante de Pitt. Incluso, casi todas las escenas giran alrededor de Pitt, lo que hace que los actores secundarios pasen a ser terciarios y que el drama quede centrado en un solo personaje (por ejemplo, el técnico pasa inadvertido, creyendo el espectador que las victorias del equipo se deben exclusivamente al gerente y no al cuerpo técnico). Es buena, con trama atrayente. Eso sí, invito a que se reflexione críticamente sobre lo que se volvió el juego: negocios basados en las expectativas matemáticas más que en el empoderamiento del jugador, en su talante. También queda muy en claro cómo el jugador profesional quedó atado (y en la película no parece que les preocupe el asunto) y sometido al capital. El deporte pasa a ser un asunto de negocios. La recomiendo.

Andrés Botero Bernal

Recomendaciones de Andrés: Beatiful boy (2010, USA)



Dirigida por Shawn Ku, y protagonizada por Michael Sheen, Maria Bello and Kyle Gallner. Se trata de una pareja cuyo hijo, en la Universidad, mata a varios de sus compañeros y profesores para luego suicidarse. La película narra el dolor de los padres, el sentimiento de culpa sobre si hicieron o no algo para que su hijo hiciera tal cosa y la forma como ellos poco a poco intentan retomar el control de sus vidas. Se nota el sello del director, por las escenas, la música, las tomas meditadas. Igualmente, los actores principales logran transmitir con gran veracidad los sentimientos que los embargas. Hay escenas que sin diálogos le dejan en claro al lector por lo que están pasando estos padres. Es una película que requiere paciencia, pues está alejada del prototipo impuesto por Hollywood. Al finalizar, y como reflexión jurídica, quedó en el ambiente la pregunta por la responsabilidad de los padres cuando sus hijos se salen de cualquier límite moral. La recomiendo ampliamente. 

Andrés Botero Bernal

Recomendaciones de Andrés: Los colores de la montaña” (Colombia, 2011)



Dirigida por Carlos César Arbeláez. Sé que voy a generar polémica pero la película (algo que va más allá del mensaje) no me gustó. Si se trabaja con actores naturales, los guiones deben ser sueltos (lo que no sucedió aquí, donde se nota cierta rigidez en los protagonistas). El manejo de cámaras es muy mediocre. La trama busca generar sensiblería en el espectador, para lograr así su apoyo al film, pero no lo cautiva con una narración o relato sui generis, ni con buena dirección, ni con buena imagen, ni con buena música de fondo o incidental. Incluso, lo bonito que hay de fotografía no es por la dirección de fotografía sino porque los paisajes hablan por sí mismos. Entonces, el que la película genere angustia, tristeza y misericordia en el espectador (algo muy loable pues este film retrata una dura realidad colombiana) no puede llevarnos a valorarla, por este mero hecho, como buena cinematográficamente. No confundamos el valor estético de una producción, con los sentimientos (buenos o malos) que genera la trama, en este caso, por una trama que relata el dolor que pasaron y pasan miles de familias colombianas desplazadas. Sí rescato, pues, la reflexión que se genera de fondo: la necesidad de ponernos en los zapatos de las familias campesinas que quedan atrapadas dentro del absurdo conflicto colombiano. La recomiendo por su trama, aunque con reservas.

Andrés Botero Bernal

Recomendaciones de Andrés: The devil’s double (2011, USA)



Dirigida por Lee Tamahori. Cuenta la historia de un doble del hijo de Saddam Hussein, Uday. Este “doble” termina por ser testigo de la brutalidad del régimen de Hussein, agravado por la personalidad límite y perversa de Uday. El actor que hace de Uday logra una excelente interpretación, aunque no tanto quien hace de “doble”, a pesar de que éste sería el protagonista de la obra. Se trata de un film con muy buena producción y un mediocre director (tal vez limitado en su creatividad artística por las exigencias de quienes financiaron la obra). Igualmente, otro serio problema de estas películas es que, por temas de mayor aceptación del público gringo, se habla en inglés estadounidense. De vez en cuando, incluso sonando ridículo, aparece una que otra palabra o frase en árabe para retomar en seguida el inglés. La verdad, no me gusta esto pues deja en claro el colonialismo cultural al que se somete el séptimo arte. Como mensaje, resalto el dolor de quien es humillado por el poder. Terrible ver personas que se creen dueños del mundo, especialmente porque fueron educados en ambientes donde sus padres en vez de formarlos los deformarlos al hacerles creen que en la vida lo importante es el fin, sin pensar en los medios. Es una película que entretiene pero no es, ni desea serlo, una película-arte. La recomiendo para quien desea entretenerse.

Andrés Botero Bernal

Recomendaciones de Andrés: Warrior (USA, 2010) ¿Acción o drama?



Dirigida magistralmente por Gavin O’Connor. Paradójicamente esta película está catalogada como film de acción y de artes marciales, cuando en verdad es una película que pone su acento en el drama humano (dos hermanos que compiten entre sí, inundados ambos de todo tipo de problemas). Además, la banda sonora es increíble (incluso ponen la Quinta Sinfonía de Beethoven con un gran efecto en el alma del espectador). El guion es muy bueno (se debe a A. Tambakis), aunque algo inverosímil (que dos hermanos terminen peleando entre sí en la final de una competencia mundial de artes marciales). En fin, se trata de un film sobre el dolor humano, los dolores que produce el pasado, la necesidad del perdón y la reconciliación, y la valentía de quien se arriesga a darlo todo por un objetivo claro (es una invitación a la no-mediocridad), donde las artes marciales son un buen elemento que alimenta al espectador y lo mantiene al tanto de la trama, pero no son, para nada, las protagonistas. Sencillamente me encantó. La recomiendo sin titubear.

Andrés Botero Bernal