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jueves, 11 de agosto de 2016

Los jueces en el cine


Ojalá pudiéramos motivar un happening en este preciso momento, es decir, una experiencia multisensorial, de hecho, el tener estas líneas en las manos, ya implica una relación multihermenéutica compleja, se habla de imágenes lejanas, tal vez algunas posiblemente alojadas en la memoria del lector, otras más cercanas a la imaginación y fomentando cierta curiosidad, por ejemplo, si ahora dijéramos: el cine judicial se resume a ese momento en el que Stallone en el papel del Juez Dredd escucha del viejo Juez (Max von Sydow) la verdad, se revela su vocación como protector de la ciudad que lo ha desterrado, el viejo yace moribundo a los pies de una enorme estatua de la justicia, que si bien no tiene venda, está cegada, como si le hubiesen quemado los ojos, sostiene la balanza en su mano izquierda, se ilumina intermitentemente por algo que asimila relámpagos pero podría ser una luz que tiene un falso, en aquél lugar en el confín de la ciudad donde comienza el exilio, la estatua delimita el mundo seguro del desconocido y destruido de aquella sociedad posapocalíptica. El juez Fargo muere, Dredd toma su metralleta imponente se pone al pie de la estatua de la justicia como para hacer un juramento, es apurado por Rob Schneider que hace el papel de un prófugo y acompaña a Stallone en su periplo, entonces Dredd, con sangre en la cara, fruto de la resistencia que le ha llevado a ese momento aciago, corta cartucho, hay una elipsis y lo vemos entrando a la ciudad nuevamente, ha dejado de ser un juez tradicional para convertirse en un justiciero.

Si usted ya vio la película quizá recuerde algo, pero seguramente los detalles los habrá olvidado, o tal vez este es el caso en el que nuestra imaginación los está magnificando. Pero la semiótica es muy simple, en un clásico de ciencia ficción basado en un gran comic: una sociedad violenta, en esta película convulsionada además por el advenimiento de un dictador que trata de reducir a cenizas el sistema de justicia, surge un héroe, el Juez Dredd, que se encargará de volver todo al orden. La vocación del poder judicial en unas cuantas imágenes, que sufre las vejaciones del poder político, que sucumbe en algunos casos, pero que al final se recompone para ayudar a la sociedad, de la que se hace ayudar, pero ha tenido que correr sangre, y en eso van incluidos algunos jueces, aunque la esperanza se basa en los nuevos como la Juez Hershey (Diane Lane), que hay que decirlo es mujer. El cine nos dice mucho, en este caso el drama judicial, que para algunos puede ser tan kitsch que o bien raya en el cine de culto o hace reír, entonces tragicomedia porque lo uno nos lleva a lo otro.

lunes, 14 de octubre de 2013

El cine de zombies y el derecho



 


Diversos filósofos han asegurado que en todo el cine encontraremos cuestiones éticas subyacentes y no parece exagerado si pensamos que en el cine la cuestión humana es siempre un recurrente, tal vez porque es hecho por seres humanos, y aun si se dejara tal tarea a una computadora el resultado sería el mismo porque dicha computadora estaría programada a partir de las expectativas de un programador humano, así, el cine incluso el que destierra lo humano a propósito, es visto por humanos quienes sacamos conclusiones de lo que observamos. El cine de ciencia ficción y el cine de horror juegan muy bien con la dialéctica humano-no humano, es la ruptura de las leyes de la física, pero también de las reglas sociales, las que nos permiten hacer hipótesis acerca de fenómenos límite. El cine de zombies es un ejemplo interesante porque habla de una situación en la que humanos-no humanos atacan a humanos para deshumanizarlos, los humanos deben hacer frente a situaciones de inminente depredación acabando con la plaga, es decir, aniquilando a estos seres, esto supone por un lado organizaciones dentro de Estados de sitio y tomas de decisiones inmediatas como por ejemplo matar a un ser querido o cercano, aunque en la hipótesis zombie, no sería propiamente la persona en cuestión y así ha sido desde White Zombie (La legión de los hombres sin alma, 1932) hasta Guerra Mundial Z (Marc Foster, 2013), sin embargo, el último cine de zombies ha manifestado que tal vez esas acciones tan inmediatas no sean tan correctas, por ejemplo en La huésped (Stepheni Meyer, 2013), Mi novio es un zombie (Jonathan Levine, 2013) y en la película mexicana Halley (Sebastian Hofmann, 2013), los zombies siguen siendo humanos y el planteamiento es lograr la empatía del espectador con estos personajes. La vehemencia por aniquilar lo extraño nos ha llevado a replantear tópicos cinematográficos tan estereotipados como los zombies, ¿no podría ser que hagamos lo mismo con sujetos empíricos de carne y hueso en nuestras sociedades a los cuales hemos invisibilizado como los indígenas, lo migrantes o las propias mujeres?
 
PS Por cierto en la película Soy leyenda (Francis Lawrence, 2007) el zombie que hace frente al protagonista muestra una serie de sentimientos todavía humanos aunque alterados pero al menos es capaz de razonar e incluso de enamorarse, pues su odio se debe a que le han matada a su pareja sentimental.

martes, 3 de abril de 2012

Recomendaciones de Andrés: Reto de valientes (Courageous, USA, 2011)



Dirigida por Alex Kendrick, quien a su vez la protagoniza. Es una película del género cristiano que se basa en la importancia del padre en el hogar. Invita a la reflexión sobre Dios, la familia, etc. El nombre se debe a que, según la película, no hay nada más valiente y difícil que asumir la dirección de una familia cristiana. Hay buenas escenas y el sonido es impecable. También se nota la buena producción que se representa en muchas escenas, con el manejo de extras, efectos especiales, etc. Es una película con un mensaje que motiva pero igualmente con un trasfondo conservador y tal vez demasiado religioso. Es posible pensar en padres agnósticos con igual compromiso en pos de lo correcto. Además, si bien la figura del padre es importante, con base en esta película se puede caer en prejuicios en contra de las familias que no responden al modelo nuclear; de igual manera, no todos los hijos de familiares nucleares con padres-presentes son buenos. Agrego que el rol que le asignan a la mujer en este film trasluce un rol conservador (mujeres amas de casa, lideradas por el hombre, etc.). En fin, hay que sacarle lo bueno y es la invitación a asumir la responsabilidad cuando se es responsable por el otro. En este sentido la película aporta mucho. La recomiendo con base en lo dicho.

Andrés Botero Bernal